Imagínate esto, me dijo, pues es esto lo que es estar enamorado. Es como si hubieras estado tropezando hacia el mar abierto por toda tu vida, y acabaras de descubrir que puedes volar.
Y habiendo dicho eso, apuntó a las enormes nubes encima de nuestras cabezas, y vi lo que debían ser millones de personas con los brazos abiertos, flotando con la corriente del viento.